La función pública de la Administración Local en los años venideros va a estar marcada por significativos cambios y retos organizativos; Nuevas demandas ciudadanas, compromisos adquiridos de desarrollo sostenible acorde a la Agenda 2030, profundas transformaciones tecnológicas, relevo intergeneracional por envejecimiento de la plantilla, … Por otra parte, novedades normativas como es el caso de la Ley 5/2023, de 7 de junio, de la Función Pública de Andalucía, de aplicación a las Administraciones Locales, proporciona un mayor amparo y desarrollo legal a aspectos como la carrera profesional, la formación y la acreditación de competencias.

La formación tiene un papel muy importante en la generación del talento innovador y en el aumento de la productividad en general. La gestión del desarrollo de Recursos Humanos gira alrededor del impulso de planes de formación y de la implantación de la carrera profesional, como mecanismos de promoción de la capacidad y la calidad para atender los servicios y necesidades de la ciudadanía, a la vez que genera oportunidades de promoción del personal.

Una adecuada preparación ante los nuevos retos no pasa únicamente por acometer transformaciones tecnológicas en los procedimientos administrativos, sino que requiere de transformaciones de mayor calado, incluyendo el fomento de la cultura de formación continua.

Sin olvidar la complementariedad con la oferta formativa externa de otras administraciones (IAAP, FAMP, ESPA, INAP, …), nuestra plantilla necesita de un plan de formación propio, con capacidad de continuidad en el tiempo, que atienda a las particularidades de la misma y las necesidades de organización de los distintos servicios, así como a la cobertura de calidad de las necesidades de las ciudadanas y ciudadanos de Armilla.